viernes, 28 de diciembre de 2012

El té de las cinco.

 Eran las cuatro y media. Permanecía impasible, fría, con la mirada en el infinito. Sentada en su sillón Luis XV, regalo de su abuela. Familia de rancio abolengo la acompañaba generación tras generación, convirtiéndola en una de las mayores riquezas de Inglaterra.
Se había casado muy jovencita con el hijo de una familia muy adinerada.Una boda concertada por ambas familias. Apenas se conocían cuando contrajeron matrimonio , pero con el tiempo se enamoró perdidamente de él.
Después de cinco años de matrimonio él le fue infiel con una amiga suya y ella se enteró. Fue la comidilla de todo su circulo, amigos y familia.
Llevaba tiempo sin salir , sin tener vida social . Se avergonzaba de que la vieran y comentaran su desafortunado matrimonio .No podía permitirlo dado su estatus y lo que ello representaba para su familia.
Llamó a la criada haciendo sonar la campanilla . Faltaban diez minutos para tomarse su té y a ella, como buena inglesa, le gustaba la puntualidad.
Se abrió la puerta y Adela la criada  entró dejando la bandeja encima de la mesita.
- Señora, ¿desea que le sirva el té?.
- No, gracias Adela ,aún no son las cinco. Lo haré yo misma. Puede retirarse.
Un rayo de luz entraba por la ventana dejando más visible el color de su cabello cobrizo, recogido en un moño bajo. Sus ojos eran claros y sus labios siempre pintados de rosa pálido ofrecían un toque de serenidad y elegancia que le hacían aun más distinguida.
La luz le impidió ver que su esposo había entrado en la habitación y hasta que no lo tuvo cerca no
percibió su presencia,
Su mirada se torno fría.  Su rostro cambió . No deseaba verlo. No podía ni debía perdonarlo .Le había dicho que tenía que abandonar la casa. A fin de cuentas era suya. Herencia de su abuelo materno.
El la miro suplicante buscando un mínimo de perdón. Se sentó junto a ella y acarició su mejilla depositando un leve beso. Ella le retiró la cara bajando la mirada. Su corazón palpitaba fuertemente y durante unos segundos estuvo tentada de devolverle aquel beso que para ella hacía  tiempo habría significado mucho, pero ahora, era tanto su dolor que sólo sintió rechazo.
Le suplicó que lo perdonara. Había sido un error. El la amaba . Siempre fue así. Ella se mantuvo insensible ante los ruegos de él.
Lo vió alejarse cruzando el jardín y por un instante se quedo quieto, quizá esperando que ella fuera a su encuentro.  Pero no fue así. Abrió la verja y desapareció.
Las lágrimas bañaron  su rostro sin poderlas controlar sintiendo como si el aire se comprimiera  a su alrededor, produciéndole un gran estremecimiento.
Rápidamente se dió cuenta y las apartó apresudaramente. Cogió  un pequeño espejo. Limpió sus mejillas. Retocó su cabello y pintó sus labios de rosa pálido.
Tocó nuevamente la campanilla y Adela, su criada, entró en la habitación.
-¿Qué desea señora?
- Adela, tráigame otro té.Se ha quedado frío.
-¿ La cena a las ocho para el señor y para usted ?
- No, Adela. El señor ya no volverá ... Se ha ido para siempre. Prepare mi equipaje. Me ausentaré durante unos días.
- Como usted diga,señora . Ahora mismo le traigo el té.
Se sentó en su sillón como si éste la protegiera, con su mirada ausente, fría, impasible, digna.





9 comentarios:

  1. Está claro que la infidelidad tuvo más peso que el amor. No estaría mal preguntarse de vez en cuando cuál es el motivo de las infidelidades, de quién o de qué es la culpa o si es más importante lo que piensen los demás que lo que piensa uno mismo.

    Un besote!

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  2. También es cierto que en esa época había muchos perjuicios y las mujeres sobre todo eran muy poco valoradas y el que dirán hacía mucha mella. Pero vamos que hoy en dia hay mucha gente que le da más importancia al que dirán antes que a ellos mismos y en este caso es asi.
    El amor debería de estar por encima de muchas cosas y cuando se quiere de verdad también es más fácil perdonar .Todo el mundo tiene derecho a equivocarse y a una oportunidad, aunque esta claro que en las relaciones no siempre se consigue.
    De todas formas tienes razón deberia ser más importante lo que piensa uno mismo.
    Un abrazo.

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  3. Te felicito por el blog.
    Un saludo y mucho éxito.
    Oliver

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  4. Gracias Oliver. Me alegro de que te guste. Espero seguir viéndote por aqui. El hecho de que la gente me lea y le guste, para mi ya es una gran satisfacción. Muchas gracias nuevamente y un saludo para ti.

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  5. Ay, ¡qué tardona soy!

    "El qué dirán", ¡cuánto daño ha hecho y sigue haciendo todavía!
    Te ha quedado una historia estupenda con prejuicios que aún conservamos. Una de las cosas que -quizá- menos fuera capaz de perdonar es una infidelidad... Seré anticuada o lo que quieras pero no sé si serían capaz.

    Un beso, guapetona y enhorabuena por este cuento tan bonito y tan bien narrado.

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  6. Hola Towanda, no te preocupes el tiempo es el mayor problema de todos nosotros y mas de las mujeres jejeje que queremos llegar a todo y no se puede. Pero tu opinión la aprecio mucho y me alegro que te haya gustado.
    La verdad que en general el ser humano estamos llenos de perjuicios que no nos dejan avanzar.
    Yo fijate hace unos años era mas intransigente pero ahora con el tiempo ya soy menos asi que no se si seria capaz o no de perdonarla. Quiza dependiera de muchas cosas no se puede decir porque a veces el amor conlleva tantas cosas...Espero que no pase jejeje.
    Bueno te mando un abrazo y hasta pronto!!!

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  7. Cierto que cuesta perdonar a quien tanto amas... pero también duele una inmensidad no tenerle más. De todos modos la vida es larga y continua, yo habría elegido también que se fuera, no por el que dirán, sino porque siempre estaría en mi cabeza su infidelidad… no es fácil olvidad.

    Besitos.

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    1. Hola Campoazul¡ Que alegría verte por aquí!. Es un tema muy complejo y difícilmente se puede saber lo que uno haría. Te aseguro que he conocido algún caso que juraban que no lo perdonarían, y luego por circunstancias y porque el amor a veces lo puede todo lo han perdonado. Si supongo que volver a confiar tiene que ser muy dificil, pero como cada pareja es un mundo....
      Un abrazo y hasta la proxima

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  8. Ánimo María, que eres un cielo.

    Un besito de domingo.

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