jueves, 28 de marzo de 2013



Amigas


Te sentías mal, defraudada, indignada e impotente. Habías dado mucho y con el tiempo te diste cuenta de que no sirvió de nada.
Muchos años de complicidad . Momentos vividos. Sonrisas perdidas en  el tiempo. Lágrimas fluyendo en aquellos momentos en los que su hombro te  consolaba.
Jamás pensaste que aquella amistad se disiparía con el tiempo, dejándote en el más profundo de los vacíos.
Siempre fuiste la misma. Entregándote con la misma pasión y nobleza que de ti se desbordaba..
¡Tantos años! .... Afortunada rutina llena de esperanza. Reconfortando tu día a día haciendo más grande la amistad, más valiosa , más sincera en un mundo muchas veces vacío. Sintiéndote dichosa por experimentar el más profundo de los sentimientos.Algo incondicional que con los años valoras y aprendes a respetar formando parte de ti misma, de la vida.

Te miras en el espejo . Tu físico ha cambiado . El tiempo lo transforma pero tu interior sigue ahí,  lleno de confianza, de valores adquiridos y no olvidados, a pesar de que el mundo trate de cambiarlos.
Tus ojos son sinceros. Tu sonrisa ... Pero algo se ha  transformado y te embarga la tristeza. Una parte de ti se rompe sin tu quererlo. ¿Por qué la gente cambia?. Quizá no hubo nada. Quizá lo soñaste. Lo necesitabas. Lo anhelabas pero no existió y si fue así el tiempo lo olvidó.

Maduraste. Aprendiste, entendiendo lo no entendible . Dejándote llevar de la melancolía, de los recuerdos que ya no volverán y es entonces cuando la frialdad y la indiferencia te abrazan sin tu quererlo.

El mundo te enseña. La gente también. Puertas que se abren. Otras  que se cierran. Esperanzas y anhelos ....

Te sigues mirando en el espejo . Te reconfortas . Te serenas .Te valoras. Te quieres. El mundo sigue ahí y tu formas parte de él.
Sigues creyendo en el ser humano, en la vida. Eres vulnerable. Eres fuerte. Eres comprensiva. Eres intolerante. La gente cambia y tu con ella . Ya no hay dolor, ni decepción. Solo confianza en uno mismo y en lo que esta vida nos va otorgando y arrebatando.

Un canto nostálgico a la amistad. Porque perdure en el tiempo...

domingo, 3 de marzo de 2013

          UN NUEVO DIA                      

Acababa de llegar a  la ciudad. Hacia frío. Se encendió un cigarrillo y expulsó el humo, deleitándose de ese gran placer. Errante, sin rumbo... Llevaba tiempo viajando de ciudad en ciudad. Quizá buscando algo. Un lugar, un sitio donde quedarse.
Observó las calles, sus gentes, sus edificios.. Se sentó en un banco y contempló la ciudad. Aquel día la niebla envolvía todo y era imposible divisar el maravilloso puente que le llevaría al otro lado del río.
Entró en un bar con la intención de tomarse un café y  entrar en calor. Se leería el periódico y permanecería un rato sentado. Estaba agotado de caminar. Observó que al irrumpir  en el café la gente se le quedó mirando y murmuraban pero a él le daba igual. Era consciente de que su apariencia física no atravesaba buen momento pero es que su vida tampoco.

Se fue al lavabo y se miró en el espejo. Realmente su semblante era horrible y desaliñado. Ojeras , barba de dos semanas... Se refrescó un poco la cara y peinó su pelo negro hacia atrás, dándole un aspecto más impoluto.
El café le sentó bien .Se deleitó con su sabor y su aroma . Rememoró tiempos pasados, cuando vivía en su ciudad y todos los días se tomaba su capuchino antes de entrar en la oficina. ¡Cuántas cosas habían acontecido desde entonces!. No era la mejor  época de su vida, indudablemente.  Su pequeña empresa había quebrado y a consecuencia de eso los problemas familiares se habían agravado hasta tal punto que vino el divorcio. Deudas, bancos, juicios, un problema detrás de otro. Así hasta tener que tomar la decisión de marcharse de la ciudad. Todo se había venido abajo. Familia , amigos , toda una vida....
Tan abstraído estaba en su pensamientos que no oyó la voz de la  camarera.

-¡Señor, perdone!.¿Me oye? . Tiene que dejar la mesa . Están reservadas para almorzar.
-Perdone señorita. Ya me voy. Estaba tan a gusto que la noción del tiempo se me pasó.
Salió a la calle. Hacia frío y caminó y caminó.....

Habían pasado tres semanas desde que llegó a la ciudad y ya se había familiarizado con ésta.Visitaba los mismos lugares cada día. Se tomaba su café . Hablaba con la misma gente.
Se sentó donde acostumbraba . Hacía una bonita mañana y  las calles se vestían de gente paseando, de niños que iban al colegio, ruidos, coches, autobuses. Empezaba un nuevo día.
¡Clin!...
Cae una moneda y otra y otra...
-¡ Gracias Señorita!. Buenos días
- Buenos días ¡ Que dios se lo pague!